Para lograr el mayor parecido posible, se cortó la nariz y las orejas y se tatuó su cara y se cuerpo. Además, el hombre se cortó la lengua en dos partes para semejar la de una serpiente. De acuerdo con The Sun, se dedica a realizar tatuajes en donde es originario, en Valle del Cauca, Colombia. Su aspecto se debe a que es aficionado a las calaveras, a tal grado que su mayor anhelo era parecerse a una de ellas.
El tatuador se define como "una persona normal que tiene un aspecto diferente a los demás", y parece no importarle las fuertes críticas que ha recibido.
Con información de elmanana.com